martes, 11 de septiembre de 2012

Y si no fuera...

La hoja en blanco se transforma, después de muchas veces de arrugarla en mi cabeza, de romperla hasta añicos que se hacen imperceptibles tan siquiera a la imaginación, una y otra vez, quieres cambiar el curso del día, pero sabes que ocurrirá, y que escribirás con dolor.


He pasado años de soledad grata, de lucha contínua por mis ideales y mis principios, de penar penas y arreglar conflictos internos, de resolver errores propios e imponer la paz en mi alma, con ese estandarte que te dá el alzarte para ver tu pasado y corregidos todos los  fallos asumidos, vivir el presente.

El error, es que hay que dar tiempo para que los demás también asuman sus errores y quieran rectificar su sistema y vivir con el presente dejando el pasado donde debe estar...alejado del hoy. Y eso, no es tarea de una,y por tanto, el dolor se presentará; aceptarlo y convivir con él,o no, es la decisión que hay que tomar.

Y la hoja se tiñe de lágrimas, se cicatriza con el dolor de las palabras y se eleva con las dudas por los aires, intentando poner un final que no sea el que se preveé desde el día antes. Y  pones de tu parte, para que eso cambie,  y a pesar de que siempre exista un daño, no sea la muerte, pero por la lucha recibes más omisión y alguna mentira, y es entonces, cuando el alma se rompe y das por perdida la batalla... esperando las noticias de los decesos, esperas horas interminables.

Horas que llegan a su fín, y una vez más, en la última agonía, intentas que se resuelva con esa inusitada esperanza de sincerad, y te mueres al recibir una mentira, esa negación categórica con alzada voz, como si eso fuera el arma de la verdad en vez de la espada que te parte el corazón y el alma, y destruye esa ciega confianza.

Y si no fuera por las horas de romper hojas en el vacio, de llorar junto amigos y de escuchar esas necesarias palabras de quién eres, qué quieres y dónde dijiste que querías llegar, hoy estaría en el camino que me llevaría de nuevo a una nueva etapa del ayer.

Y si no fuera porque leo en los ojos y en el abrazo, si no entendiera tus heridas y viera el desconcierto en tu vida, si no supiera que no hubo tiempo de vivir el adios y empezar con el presente sin pasado que penar, si no estuviera enamorada de ese alma abierta a entregarse, si no creyera en que es posible unir tus pedazos y los mios y hacer una página blanca y nueva, si no fuera porque pido y se que pido demasiado, si no fuera porque necesito rozar tu rostro con mis dedos y decirte guapo, sentirte cálido entre mis brazos y amarte se me hace fácil.

Hoy escribiría tiñendo el papel de sangre.

Regreso a dos días antes... olvido y borro un día de nuestra vida, con todo lo que conlleva, con darle el tiempo que se necesita para que la tirita haga su función, y la memoria se vuelva débil y los actos se borren de mi mente,  y empiezo de nuevo... empezamos de nuevo.

Y si no fuera, haría porque fuera.

2 comentarios:

  1. Bravo Yolanda. Estoy contigo .........."Y si no fuera, haría porque fuera".

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  2. Dicen por ahí, que he cambiado mucho... que antes hubiera escrito, "como ha de ser y no es, aquí pongo el punto y final"...será que con la edad, me he vuelto sensible, o que valoro los acontecimientos de diferente manera, pero aplicaré el refrán de "obras son amores y no buenas razones".

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